Como primer presidente electo fue Gualberto Lizarraga. Los demás cargos se distribuyeron en: Carlos Neuman (vicepresidente), Nicolás Mandriotti (secretario), Alfonso Venegas (pro-secretario), Luis Silva (tesorero), Carlos Benavides (pro-tesorero) y Carlos Sánchez (fiscal).
El color original de su camiseta les hizo ganarse el apelativo de “los rosados” aunque también se ganaron el apelativo de “porteños”, por nacer en el primer puerto del Perú. Muchos años después, esta relación entre el puerto, el mar, el fútbol y los goles, les darían otro sobrenombres más: “La Misilera”.
El equipo participó en la liga del Callao y en 1933 consiguió ascender a la primera categoría del balompié nacional. Dos años después, logró su primer campeonato. El club tenía, en ese entonces, una generación de buenos jugadores que formaron en su totalidad la selección nacional que participó en los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936.
Aquella participación es muy recordada por todos los chalacos. El Sport Boys fue el único equipo que llevó a sus once jugadores a tierras germanas. Como se recuerda, el mundo atravesaba por la segunda guerra mundial, pero el fútbol se encargaría de unir naciones.
Entre los jugadores de esos años destacaron los hermanos Jorge y Teodoro Alcalde, así como el pequeño “Titina” Castillo. En los años 50 brilló Valeriano López, quien es el máximo ídolo porteño. Este majestuoso delantero fue campeón profesional con el Sport Boys en 1951 (primer campeonato profesional) y luego en 1958. Además ostenta el récord de goles por partido, 31 anotaciones en apenas 18 juegos.
También están en el corazón de la hinchada chalaca: Guillermo Barbadillo, Juan José Muñante, Gerónimo Barbadillo, Julio Meléndez y el gran Oswaldo “Cachito” Ramírez, a quien se le recuerda por sus dos goles en el estadio La Bombonera en 1969.
El ultimo título nacional de los rosados fue el 27 de Agosto de 1984, logrado por jugadores como: Juan Carlos Cabanillas, Cesar Espino, Pedro Requena, “Chacal” Herrera y el recordado entrenador Marcos Calderón.
En 1987 el equipo perdió la categoría, sin embargo, dos años después (1989) regresó a primera división, clasificando a la Copa Libertadores el mismo año de su retorno (1990).
